El fin de semana culminó con una lectura comiquera. Y doble además.
En primer lugar “Saint-Exupéry, el último vuelo”, de Norma Editorial, poco había leído yo antes del gran Hugo Pratt, algo de su famosísimo Corto Maltés y poco más, se que es un error ya que es uno de los grandes autores del comic que nadie debería dejar pasar. En este tomo en concreto nos muestra pasajes de la vida del autor de “El principito” entroncándola de una manera curiosa con su último vuelo y el misterio que envuelve su muerte o mejor dicho su desaparición. Es una agradable lectura que dice mucho en momentos en los que no parece decir nada. Además cuenta con un prefacio de Umberto Eco que nos demuestra que el destino llamaba a cruzar los caminos de Saint-Exupéry y Pratt. También el propio Pratt nos da sus motivos para hacer esta historia en una entrevista que se me antoja algo corta. Como broche el tomo incluye una serie de bocetos de la propia historia en los que se puede ver la evolución creativa del comic.
La segunda lectura fue “El Faro” de Paco Roca, del a colección Lecturas Compulsivas, de Astiberri, que ha sido una gran sorpresa para mí. Desconocía a este autor y sigo sin saber si ésta es su primera obra o lleva años en el mundo del comic. El caso es que la historia me ha agradado mucho, y eso que a mí los temas de la guerra civil me parecen demasiado trillados. El caso es que eludiendo caer en tópicos y, aunque no lo parezca en favoritismos, cuenta una historia sobre como la fantasía puede salvar el alma y, por qué no, la vida a una persona, la fantasía y el buscarse un objetivo vital. Y no solo me ha gustado argumentísticamente hablando, en el ámbito gráfico también me ha dejado bastante satisfecho. Vaya que es una lectura muy recomendada.
Y para terminar voy a tomar una cita, de esas que te dejan huella y pensando un rato, que he tomado prestada de dicho comic, aunque realmente vaya firmada por Mark Twain:
“Dentro de veinte años te sentirás más desilusionado por las cosas que no hiciste que por aquellas que hiciste. Así que suelta amarras. Navega fuera de la bahía segura. Atrapa los alisios en tus velas. Explora. Sueña. Descubre…”
En primer lugar “Saint-Exupéry, el último vuelo”, de Norma Editorial, poco había leído yo antes del gran Hugo Pratt, algo de su famosísimo Corto Maltés y poco más, se que es un error ya que es uno de los grandes autores del comic que nadie debería dejar pasar. En este tomo en concreto nos muestra pasajes de la vida del autor de “El principito” entroncándola de una manera curiosa con su último vuelo y el misterio que envuelve su muerte o mejor dicho su desaparición. Es una agradable lectura que dice mucho en momentos en los que no parece decir nada. Además cuenta con un prefacio de Umberto Eco que nos demuestra que el destino llamaba a cruzar los caminos de Saint-Exupéry y Pratt. También el propio Pratt nos da sus motivos para hacer esta historia en una entrevista que se me antoja algo corta. Como broche el tomo incluye una serie de bocetos de la propia historia en los que se puede ver la evolución creativa del comic.
La segunda lectura fue “El Faro” de Paco Roca, del a colección Lecturas Compulsivas, de Astiberri, que ha sido una gran sorpresa para mí. Desconocía a este autor y sigo sin saber si ésta es su primera obra o lleva años en el mundo del comic. El caso es que la historia me ha agradado mucho, y eso que a mí los temas de la guerra civil me parecen demasiado trillados. El caso es que eludiendo caer en tópicos y, aunque no lo parezca en favoritismos, cuenta una historia sobre como la fantasía puede salvar el alma y, por qué no, la vida a una persona, la fantasía y el buscarse un objetivo vital. Y no solo me ha gustado argumentísticamente hablando, en el ámbito gráfico también me ha dejado bastante satisfecho. Vaya que es una lectura muy recomendada.
Y para terminar voy a tomar una cita, de esas que te dejan huella y pensando un rato, que he tomado prestada de dicho comic, aunque realmente vaya firmada por Mark Twain:
“Dentro de veinte años te sentirás más desilusionado por las cosas que no hiciste que por aquellas que hiciste. Así que suelta amarras. Navega fuera de la bahía segura. Atrapa los alisios en tus velas. Explora. Sueña. Descubre…”
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