Bon Voyage

Anoche me despedí de una gran persona para lo que parece que va a ser mucho tiempo. Y es que una ex compañera de trabajo va a empezar una nueva fase de su vida como Fisioterapeuta en Francia.
Yo por un lado me alegro, y mucho, por ella, me alegro de que por fin vea cumplido uno de sus sueños, con todo el trabajo que le ha costado. Pero por otro lado me entristezco, ya que no se cuando la volveré a ver y es de esas personas que dejan marca en tu vida. La cuestión es que no es alguien normal, ella es pura vitalidad, energía y sobre todo cariño, para con todos, tanto pacientes como compañeros o como amigos.
El tiempo que estuve trabajando con ella fue una maravilla, aprendí y disfruté mucho profesional y personalmente. Gente como ella es necesaria en nuestra sociedad egoísta y gris. A mí me fue de gran ayuda, sobre todo en un periodo de mi vida en el que me encontraba bastante perdido, desanimado y falto de fuerzas. Resumiendo, consiguió reencontrarme conmigo mismo.
Que suerte tienen los franceses, y que gran pérdida para nosotros. Es una lástima que alguien tan válido como ella tenga que dejar todo para conseguir un trabajo decente y que se ajuste a lo que todos teníamos en mente cuando hacíamos la carrera.

Así que gracias por todo, gracias por lo que hiciste por mí y gracias por lo que hiciste por el resto. Y suerte, jamás te desanimes que tu vales mucho, recuerda lo que te dije en una ocasión. No pierdas el contacto, estamos aquí para lo que quieras.

Y ten una cosa por seguro, te voy a echar muchísimo de menos, ya lo sabes tu bien.

Muchos besos, llama cuando llegues.